UN CASCO MILITAR COMO BACIN

Ahora que nos “sobra el tiempo” a la fuerza, me he dedicado a escribir como siempre, breves relatos en mi blog, la mayoría son recuerdos de alguna parte de mi vida, cuando hecho andar mis neuronas hacia atrás: dicen que mientras vivimos una experiencia, el cerebro crea su memoria, utilizando la misma neurona que borra un recuerdo anterior innecesario... pero estoy segura que esta para mi fue muy importante, a Dios gracias no se borro. Digo “caray, que bonito eran esos tiempos” con cosas simples pero que marcaron época.

Recuerdo que siempre hemos viajado mucho desde chicos pues mi padre trabajaba en un lugar diferente de Lima, y obviamente nos trasladábamos toda la familia a la “extraña ciudad”, la que pronto se convertiría “como en casa” pues siempre encontrábamos a gente buena, hospitalaria, cariñosa, hemos sido un poco iqueños, un poco tacneños, un poco arequipeños

Nuestros primeros viajes eran de Lima a Ica y viceversa, no sé cuál era la empresa de transportes en la que nos movilizábamos, teníamos algo así entre cuatro y seis años mi hermano y yo,  recuerdo a mi mami con una chompa de hilo blanco manga larga y su pantalón chupete negro tipo leggins, en una mano agarrándonos a nosotros dos y en la otra su maletín de viaje y un casco de guerra de juguete color verde de mi hermano, casco que quedo grabado en mi memoria, pues  este se convertía en bacinica (Dícese de un orinal, bacinilla, bacinica, bacín bajo o pelela, es un recipiente en forma de cuenco empleado para recoger los excrementos y la orina) ayy no puedo dejar que este párrafo me saque una sonrisa, bueno lo usaba mamá cuando alguno de nosotros queríamos orinar, en ese tiempo los buses no tenían baños, y pues cumplía su fin, lo gracioso y algo poco higiénico era que al abrir la ventana para desecharlo, el aire en sentido contrario hacia que salpicara algunas gotas a la cara, tal vez los seguidores de la “orinoterapia” habrían estado a favor de esta acción.

Bueno el asunto es que servía para el fin y luego mamá nos abrigaba y continuábamos durmiendo hasta llegar a destino,(les cuentos que éramos sumamente obediente, tanto así que los amigos de mis padres le decían "tus hijos son muy tranquilos, parecen soncitos"...que atrevimiento!!!) imagino que mamá le diría a mi hermano si no tienes puntería orina sentadito… anécdotas sencillas pero que atesoro. Bellos recuerdos de mamá.

Mery Rosas - Abril 2020